La LFPIORPI, o Ley Federal para la Prevención e Identificación de Operaciones con Recursos de Procedencia Ilícita, (lo sabemos, tiene unas siglas complicadas de pronunciar) es la ley que se encarga de combatir el lavado de dinero en México. Básicamente, la idea es que las actividades económicas susceptibles a manejar dinero “extraño” estén bajo el radar del SAT. Con esto, se busca evitar que el dinero ilícito termine en cuentas legítimas o negocios formales.
¿Qué es y para qué sirve la Ley Antilavado?
La Ley Antilavado obliga a ciertos sectores —sí, a ti también si tienes un negocio de lujo o de servicios financieros— a identificar a sus clientes y reportar al SAT aquellas transacciones que superen ciertos montos. La misión de la ley es proteger la economía y evitar que las mafias conviertan dinero ilícito en recursos limpios. Esto beneficia a todos: se reduce el riesgo de delitos asociados con el lavado de dinero, como el fraude y la corrupción.
Principales obligaciones bajo la LFPIORPI
Si tu empresa está en la lista de “sujetos obligados”, aquí van algunas de tus tareas principales:
- Identificar a tus clientes, verificando sus datos para evitar sorpresas.
- Reportar operaciones sospechosas o de alto valor al SAT.
- Registrar y guardar documentos que validen las transacciones.
- Capacitar a tu personal sobre cómo cumplir con la ley.
- Presentar los Avisos en la Secretaría en los tiempos y bajo la forma prevista en esta Ley.
- Proteger y resguardar la información y documentación que sirva de soporte a la Actividad Vulnerable.
- Brindar las facilidades necesarias para que se lleven a cabo las visitas de verificación.
- Solicitar al cliente o usuario, información acerca del dueño beneficiario, y de existir, mostrar documentación oficial de este.
Al cumplir con estas obligaciones, ayudas a mantener el sistema limpio y, de paso, evitas caer en sanciones (de esas que duelen en la cartera).
Operaciones que deben ser reportadas bajo la LFPIORPI
¿Tienes clientes comprando joyas, coches de lujo o pagando inmuebles al contado? Estos son solo algunos ejemplos de operaciones que deben reportarse al SAT, siempre que superen montos específicos. La lista es variada e incluye desde servicios de contabilidad hasta arte. No hay que confiarse: si trabajas en alguno de estos sectores, más vale que lleves tu contabilidad al día.
Sanciones por incumplimiento de la LFPIORPI
Aquí no hay de otra: quien no cumple, paga. Las sanciones pueden ser fuertes y van desde multas hasta otros castigos más graves. No cumplir con las obligaciones de la ley puede costar desde unos miles hasta varios millones de pesos. Así que, si eres “sujeto obligado” y piensas omitir algún reporte, ¡piénsalo dos veces! Más vale prevenir que lamentar.
Pasos para cumplir con la LFPIORPI
Para que no te sorprenda una multa, sigue estos pasos:
- Regístrate en el portal del SAT y asegúrate de estar en regla.
- Identifica y verifica a tus clientes en cada operación relevante.
- Lleva registros claros de cada transacción.
- Reporta a tiempo aquellas actividades que excedan los límites establecidos.
Con estos pasos básicos te aseguras de cumplir con la LFPIORPI y dormir tranquilo. Además, recuerda que el SAT tiene el portal donde puedes gestionar todo esto.
La LFPIORPI se creó para prevenir que el dinero de dudosa procedencia entre en el sistema financiero. Aunque puede parecer una carga administrativa, cumplir con esta ley es una forma de colaborar con la seguridad económica del país.