julio 2024 | TaxDown

Un crédito fiscal es el dinero que debes al gobierno por conceptos relacionados con impuestos, servicios o contribuciones. En otras palabras, es una deuda que tienes con el SAT, ya sea por impuestos no pagados, multas, recargos u otros conceptos que establece la ley. 

Según el artículo 4º del Código Fiscal de la Federación:

«Son créditos fiscales los que tenga derecho a percibir el Estado o sus organismos descentralizados que provengan de contribuciones, de sus accesorios o de aprovechamientos, incluyendo los que deriven de responsabilidades que el Estado tenga derecho a exigir de sus funcionarios o empleados o de los particulares, así como aquellos a los que las leyes les den ese carácter y el Estado tenga derecho a percibir por cuenta ajena. La recaudación proveniente de todos los ingresos de la Federación, aun cuando se destinen a un fin específico, se hará por la Secretaría de Hacienda y Crédito Público o por las oficinas que dicha Secretaría autorice.» 

Estos créditos fiscales pueden originarse de varias maneras, tales como: 

  • Impuestos: Son pagos que debes hacer al gobierno basados en tus ingresos, compras, propiedades y otros aspectos de tu vida económica. 
  • Derechos: Pagos que realizas al Estado por el uso de servicios públicos, como el suministro de agua o el manejo de residuos. 
  • Aportaciones de seguridad social: Contribuciones obligatorias relacionadas con la protección social, como las pensiones y servicios médicos. 
  • Contribuciones de mejora: Cantidades que se abonan por las mejoras que recibes directamente de obras públicas realizadas en tu área. 
  • Accesorios de contribuciones: Incluyen multas, recargos y otros gastos adicionales que se generan cuando no cumples con tus obligaciones fiscales a tiempo. 
  • Aprovechamientos: Son ingresos que obtiene el Estado por actividades no directamente relacionadas con contribuciones, como sanciones por incumplimiento de normas. 

Entender qué es un crédito fiscal y cómo puede originarse es fundamental para manejar tus obligaciones fiscales de manera adecuada. Si tienes un crédito fiscal pendiente, es importante que lo regularices para evitar problemas adicionales, como multas o intereses.  

Si tienes dudas o necesitas asistencia, en TaxDown puedes encontrar asesoría de expertos para asegurarte de cumplir con todas tus obligaciones fiscales de manera correcta y oportuna. 

Recuerda que estar al tanto de tus créditos fiscales y actuar con prontitud puede ayudarte a evitar complicaciones y asegurar que tu situación financiera esté en orden. 

En la era digital, las compras y transacciones en línea son más comunes que nunca. Sin embargo, también lo son las estafas y páginas fraudulentas. Aquí te ofrecemos una guía completa de los puntos clave para detectar sitios web inseguros y protegerte de posibles fraudes. 

1. Verifica la URL y el Certificado de Seguridad 

HTTPS vs. HTTP: Es la manera más rápida de saber si un sitio web es seguro. Para esto necesitas revisar la barra de direcciones de tu navegador. Busca un «HTTPS» y un candado al lado de la URL. El HTTPS indica que el sitio utiliza encriptación SSL, en pocas palabras es una tecnología que protege la información que envías y recibes en internet, es como una caja fuerte virtual. 

Estos certificados son reconocidos automáticamente por los navegadores, que muestran un candado cerrado en la barra de direcciones. Si una página o tienda en línea no tiene certificado digital, piensa muy bien si tus datos personales estarán seguros. 

2. Revisa el Pie de Página 

Información de la Empresa: Algunos sitios incluyen información de la empresa en el pie de página, como dirección física, CIF, y teléfono de contacto.  

Política de Privacidad y Enlaces: Si la política de privacidad no está traducida adecuadamente o parece un texto copiado de otra página, ten cuidado. Además, si el sitio menciona el uso de SSL pero opera sobre HTTP, la conexión no es segura. También es sospechoso si no se te pide aceptar cookies o si el apartado de envíos y devoluciones no proporciona formas claras de contacto, solo un formulario. 

3. Usa Navegadores con Navegación Segura 

Google Chrome: Seguro, sencillo de usar, y muy intuitivo. Incorpora una función de navegación segura que te avisa sobre sitios de phishing o malware. 

Chromium: Versión de código abierto de Google Chrome que permite integrar software de terceros. 

Firefox: Su API de navegación es muy segura y te alerta sobre posibles ciberataques. 

Brave: Enfocado en la seguridad, con funcionalidades para bloquear amenazas online. 

4. Consejos para Protegerte de Estafas Online 

Métodos de Pago Seguros: Evita páginas que solo permiten pagar mediante transferencia bancaria. Busca sitios que acepten varias opciones de pago como PayPal, Mastercard y Visa, u otros medios autorizados, ya que estos métodos protegen al comprador ante estafas. 

Presencia Online de la Empresa: Si la empresa no tiene más rastro en internet que su propia web, es mejor evitarla. Las tiendas falsas no suelen tener presencia online, comentarios de usuarios, ni perfiles activos en redes sociales. 

Perfiles de Redes Sociales: Revisa los perfiles de redes sociales de la tienda. Perfiles sin actividad o iconos que no redirigen a ninguna página son malas señales. 

Estructura y Contenido de la Página: Presta atención a la estructura de la página. Espacios desiguales, objetos fuera de lugar y errores ortográficos son indicativos de que la página podría ser fraudulenta. 

Protegerte de estafas en línea es crucial en el mundo digital actual. Siguiendo estos consejos y verificando la seguridad de los sitios web, puedes navegar y realizar tus transacciones con mayor confianza y tranquilidad. En TaxDown, nos comprometemos con tu seguridad, cumpliendo con todos los lineamientos de protección de datos y certificaciones necesarias. Nuestro sitio utiliza HTTPS y encriptación SSL, asegurando que toda tu información esté siempre protegida. Con TaxDown, puedes gestionar tu devolución de impuestos con la confianza de estar en un entorno seguro y confiable. 

Devolución Automática y Devolución Manual del Saldo a Favor 

La temporada para presentar la declaración anual y recuperar saldos a favor del SAT comienza el 1 de abril y termina el 30 de abril de cada año. Aunque el plazo oficial para presentar la declaración anual es de solo un mes, el proceso no termina ahí. El SAT ofrece un periodo adicional, del 1 de abril al 31 de julio, para recuperar el saldo a favor de manera automática. 

¿Qué es la Devolución Automática? 

La Devolución Automática ocurre cuando presentas tu declaración dentro del plazo establecido, toda la documentación está en orden y la tecnología del SAT revisa, procesa y deposita tu devolución hasta en 40 días hábiles.  

¿Qué pasa si presentas la declaración fuera de plazo? 

Si estás obligado a presentar la declaración y lo haces fuera del plazo, aún puedes recuperar tu saldo. Sin embargo, el SAT puede generar una multa por la presentación tardía. 

¿Y si quieres recuperar tu saldo después del 31 de julio? 

A partir de agosto, cualquier saldo a favor se considera del año anterior. Aún puedes recuperarlo, pero el proceso es más complejo, ya que se solicita una devolución manual mediante un Formato Electrónico de Devoluciones (FED), un trámite que puede tardar entre 20 y 40 días hábiles. 

Resumen: 

Devolución Automática: (1 de abril – 31 de julio): Presentación dentro del plazo, revisión rápida, devolución hasta en 40 días hábiles. 

Devolución Manual: (a partir de agosto): Proceso más complejo y lento (20 a 40 días hábiles), requiere un FED. 

Para más detalles sobre los años anteriores y el FED, consulta nuestro artículo especializado. 

Nuestra Recomendación: 

Para evitar complicaciones, te recomendamos presentar tu declaración en tiempo y forma. En TaxDown, nos especializamos en la presentación de la declaración anual y la recuperación de saldos a favor. Te ofrecemos asesoría durante todo el año para despejar tus dudas sobre el SAT y ayudarte a mejorar tus resultados anuales.