Te quedaste sin chamba y ahora te preguntas ¿tengo que declarar impuestos? Pues depende. Aunque no estés recibiendo un sueldo fijo, hay situaciones en las que podrías estar obligado a presentar tu declaración. Pero calma, que aquí te explicamos todo sin enredos y con un poco de buen humor.
¿Cuándo debes declarar, aunque no tengas trabajo?
No tener patrón no significa estar libre de impuestos. Existen ingresos que sí pueden hacerte candidato a declarar:
- Pensiones y jubilaciones: Aunque ya te hayas retirado, algunas pensiones pueden estar sujetas a impuestos.
- Indemnización por despido: Si te dieron tu finiquito, una parte podría estar gravada.
- Ingresos por rentas: Si tienes un depa que rentas, el SAT también quiere su parte del pastel.
- Intereses bancarios: Aunque sea poquito, si el banco te pagó intereses, ya estás generando ingresos.
- Trabajitos esporádicos: Venta de productos, freelance, rifas, tandas… Si generaste dinero, considera revisarlo.
Si reconociste alguno de estos casos, ponle atención a tu declaración porque el SAT no perdona.
¡Conoce tu resultado totalmente gratis! 👉
¿Qué pasa si no presento la declaración?
Si crees que ignorar la declaración hará que desaparezca, piénsalo de nuevo. Podrías enfrentarte a:
- Multas y sanciones: No declarar puede salir más caro que hacerlo desde el principio.
- Recargos e intereses: Como cuando te atrasas con la tarjeta y de pronto la deuda se triplica.
- Revisión del SAT: Si detectan ingresos y no declaraste, podrían investigarte.
- Bloqueo de devoluciones futuras: Si en algún momento tienes saldo a favor, podrías no recibirlo hasta ponerte al corriente.
En pocas palabras, más vale prevenir que lamentar. No es broma, el SAT no tiene sentido del humor.

¿Cómo hacer la declaración sin ingresos laborales?
Si debes declarar, pero no tienes nómina, sigue estos pasos:
- Entra a la plataforma del SAT: Desde tu compu, sin hacer filas eternas.
- Revisa si tienes ingresos declarables: Checa si bancos, empresas o cualquier otra fuente de ingreso reportó algo a tu nombre.
- Llena la declaración: Aunque no tengas sueldo fijo, puedes indicar otros ingresos o incluso dejar en claro que no generaste nada.
- Envía y guarda el comprobante: Porque uno nunca sabe cuándo lo vas a necesitar.
Si esto te suena complicado, tranquilo. Hay formas más fáciles de hacerlo.
¿Vale la pena declarar, aunque no hayas trabajado?
Si estás pensando «¿para qué declarar si no generé dinero?», aquí hay razones para que lo reconsideres:
- Podrías recibir un saldo a favor: Y si el SAT te debe, mejor recuperarlo.
- Mantienes un historial limpio: Nunca sabes cuándo vas a necesitar hacer algún trámite con Hacienda.
- Facilita trámites financieros: Algunos bancos piden historial fiscal para darte créditos.
- Evitas dolores de cabeza: No hay nada peor que una carta sorpresa del SAT preguntando por tu declaración.
Carlos acaba de recuperar $3,500 mxn de sus impuestos.
¿No quieres declarar? TaxDown lo hace por ti
Si todo esto te parece un enredo y prefieres evitar el estrés, TaxDown es tu mejor opción. Con su plataforma y asesores expertos, hacer tu declaración será más fácil que decidir qué pedir de comer.
No dejes que el SAT te tome por sorpresa. Calcula tu monto con TaxDown y descubre si tienes saldo a favor.
En resumen, aunque estés desempleado, podrías tener que declarar impuestos. No hacerlo trae consecuencias, pero si lo haces bien, hasta podrías llevarte una sorpresa agradable. Lo bueno es que con TaxDown puedes hacerlo fácil y sin complicaciones. ¡Así que mejor ponte al corriente y duerme tranquilo!
¡8 de cada 10 trabajadores tienen saldo a favor!
Descubre si eres uno de ellos gratuitamente con TaxDown y recupera el dinero que te pertenece con nuestra ayuda.

¿Te ha servido este artículo?
Todos los medios hablan de nosotros
















Deja una respuesta